Estaba leyendo mis publicaciones y me pregunté ¿porque solo escribo cosas tristes? Y aunque en el fondo sabía la respuesta, la evadí decidiendo escribir algo. No sé si sea triste lo que voy a escribir pero tenía ganas de materializar las ideas que daban vuelta en mi cabeza. Y es que últimamente he estado muy ocupado haciendo cosas que en realidad me gusta hacer, y estar ocupado ha hecho que olvide alguna cosas que solo perturbaban mi existencia (aunque a veces hay alguien que se encarga de recordármelas) lo que ha tenido como resultado que los últimos días hayan sido placenteros. Por otro lado paralelamente a esto han ocurrido otras cosas (si revisan las publicaciones antiguas encontraran una donde hablo acerca de conocer a alguien) que de momento he tratado de pasar por alto, porque al parecer no estoy listo para repetir algunas cosas en mi vida. De momento no se que sea lo que está por venir. El año está por terminar y escribiendo esta línea recordé que precisamente hoy hace dos años atrás, empezaron una serie de acontecimientos, algunos gratos y otros no tanto pero de lo que si estoy seguro es que aprendí de los errores que cometí y no estoy dispuesto a volverlos a cometer.
Precisamente eso quizás sea lo importante de todo lo que nos pasa en esta vida, aprender de nuestros errores y por qué no también de nuestros aciertos. Recordemos que los únicos afectados por nuestras decisiones somos nosotros mismos, así que tratemos de ser afectados positivamente en cada paso que demos en nuestras vidas.
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